Taller de Repostería en el Monasterio de las Hermanas Clarisas de Alhama de Granada
Este pasado fin de semana se iniciaron las distintas actividades organizadas por la Asociación Gastronómica y Cultural de la Axarquía (AG&CA) para el presente año. Así, una representación de sus integrantes viajó hasta Alhama de Granada con el objetivo de visitar a las Hermanas Clarisas de esta localidad granadina y participar con ellas en el I Taller de Reposteria de Conventos organizado por esta Asociación.
Miel, azúcar, almendra y especias son los ingredientes imprescindibles en la repostería granadina. De clara influencia árabe son, paradójicamente, los dulces que elaboran las monjas en los conventos de clausura los que han logrado más renombre. De entre estos conventos, el de las Hermanas Clarisas de Alhama de Granada es uno de los más conocidos de la región andaluza. En las cocinas del Monasterio de San Diego, pudimos comprobar en situ la influencia musulmana que aún se respira entre los fogones que aún utilizan las Hermanas Clara, Pilar y Francisca, que tan amablemente nos recibieron.
Pero no todo se centró en la gastronomía, los asistentes a este Taller de Repostería también pudieron conocer las experiencias de estas ‘humildes y entregadas’ monjitas. Sus vidas dedicadas al prójimo, a su vocación y a mantener vivo este Monasterio. Una visita por la iglesia, su coro y por el retablo central de estilo neobarroco, en el que cabe destacar la imagen de la Inmaculada (siglo XVII) atribuida a Alonso de Mena, así como algunos restos de pintura mural, con temas bucólicos, formaron parte de la visita cultural por esta construcción de gran valor histórico y artístico de nuestro patrimonio andaluz.
La Asociación Gastronómica y Cultural de la Axarquía empezó a dar sus primeros pasas el pasado año y tiene como objetivo fundamental promover y fomentar la gastronomía veleña, la de la Comarca de la Axarquía y la de nuestra Comunidad Autónoma, como manifestación esencial de nuestra cultura, así como la realización de actividades gastronómicas y culturales para el conocimiento de la ingente riqueza culinaria andaluza, y todo ello, en el marco de un continúo y recíproco enriquecimiento colectivo entre nuestros pueblos.
